Se acabó el jugo

Maeve

No soy de las que usan vestidos de sol y cárdigans. Nunca me he considerado delicadamente femenina, de ninguna manera. Me gusta la ropa con la que puedo moverme—pantalones cortos deportivos, zapatillas, una sudadera si hace frío... o las modas etéreas y fluidas con las que crecí en el Valle V...

Inicia sesión y continúa leyendo