Capítulo 43

Sus lágrimas me golpearon profundamente, fue como una espada que rompió mi corazón de piedra, fue como un ungüento calmante que hizo evaporar toda la ira en mí y sentí que mi corazón se volvía pesado, todos mis huesos se debilitaron mientras descendía lentamente al suelo. Mi cuerpo volvía a su estad...

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