Capítulo 56

—Ay no, por Dios, mi padre me matará, Gaspar, Gaspar ¿estás bien? —la preocupación de Margarita no era la propia de alguien que se preocupa por un ser querido, más se parecía a alguien que actuaba por coacción, y como ella misma lo había dicho, tal parecía que, si algo le pasaba a ese hombre, Ge...

Inicia sesión y continúa leyendo