Capítulo uno: No te quiero

POV DE ANNA

"¡No te amo, Anna!" Las palabras de Lucas resonaron por toda la gran pared mientras mi corazón se estremecía. Sentí como si estuviera oyendo cosas mientras me tambaleaba.

"¿Qué dijiste?" pregunté, solo para estar segura. Mientras miraba a mi alrededor, nerviosa, me sentía más consciente de mí misma que nunca. Todos los ojos estaban puestos en nosotros mientras estábamos en el centro del escenario. Pero en lo más profundo de mí, estaba en un torbellino.

"¡No te amo! ¡Eres mi compañera, pero creo que la Diosa Luna cometió un error!" tronó, en un tono fuerte y cruel. Su voz cruel resonó por todo el salón y los miembros de la manada eran testigos de mi miseria. Mi cerebro se aceleró.

¡No podía creerlo! Mis ojos se llenaron de lágrimas mientras mi corazón se estremecía.

La Diosa Luna finalmente me había bendecido con alguien que me amaría y ¿ahora esto?

¿Por qué siempre soy tan desafortunada?

Mientras miraba a Lucas, que tenía una expresión implacable en su rostro, no estaba dispuesta a dejar ir a mi compañero.

Inmediatamente hablé, en un tono desesperado, "¡No! ¡Eres mi compañero! ¡Se supone que debes amarme! ¿No es esa la promesa que nos hicimos?" grité mientras lo señalaba, con los ojos rojos. Mi corazón se rompía cada segundo y no podía creer que Lucas me hiciera esto.

Sin embargo, él me miró con ojos llenos de lástima y disgusto.

Pero no me importaba. Él tenía que ser mío. Rápidamente, me moví, solo para tocarlo y hacerle recordar el amor que compartimos. Nos habíamos proclamado amor el uno al otro y ahora, de repente, él cambiaba.

Para mi desdicha, Lucas fue rápido en retroceder, con disgusto, ya que no quería que lo tocara.

"Por favor..." dije, en voz alta y con un tono tembloroso mientras mis rodillas se debilitaban. Las lágrimas brotaban de mis ojos como un océano al darme cuenta de que realmente podría no quererme más.

"Lucas, por favor, no me hagas esto." supliqué, mientras caía de rodillas y luego me sujetaba el pecho ardiente. Los murmullos y las risas de burla de todos a mi alrededor llegaban a mis oídos y sentía ganas de desaparecer del mundo.

"Vaya, así que resultó ser su compañera, ¿eh? ¡Nunca pensé que ella lo lograría!" escuché decir a alguien mientras mis labios temblaban.

Quería gritarle a todos que se detuvieran mientras mi cuerpo temblaba en el suelo desnudo.

No podía creer que Lucas me diera la espalda.

¡Hace dos días descubrimos que éramos compañeros! Fue el día más hermoso de mi vida y habíamos hecho el amor.

Finalmente podía estar con alguien que me amaría de verdad. Sin embargo, mis esperanzas fueron destrozadas en la ceremonia de apareamiento.

En esta reunión, Lucas se suponía que me presentaría a los miembros de la manada como su compañera. ¡Él es el hijo del Alfa y tiene la obligación de conseguir una compañera rápidamente!

Era una bendición disfrazada ser su compañera, ya que era buscado por casi todas las mujeres.

Sin embargo, esa bendición se había convertido en una espina en mi carne. ¿Por qué me daría tanta esperanza y luego me dejaría caer en los abismos del infierno ante todos?

¡¿Por qué?!

Mientras los murmullos y las risas continuaban, me di cuenta de que no podía dejar que las cosas se desarrollaran así. Necesitaba tomar lo que era mío. ¡Era fuerte e independiente! La vida con mi familia me había hecho depender de mí misma, y ansiaba tanto el amor. No podía dejarlo ir, después de saber lo que se siente. Una vez más, estaba decidida a suplicar por su amor, aunque me hubiera mirado con tanto disgusto.

Ya estaba miserable después de que me dijera que no me amaba. ¿Qué pasaría si me rechazaba? Mi cerebro ya estaba acelerado y entró en un estado de estrés, al razonar que probablemente me rechazaría por completo.

Me di cuenta de que no podría vivir si lo hacía.

"¡Lucas! ¡Por favor!" dije, en un tono suplicante mientras me arrastraba hacia él. Inmediatamente, lo miré, pero ahora había dos rostros mirándome.

¿Qué estaba pasando aquí? ¿Emily? ¿Cuándo llegó aquí? Estaba tan perdida en mis pensamientos que no la había notado entrar.

"Lucas, ¿qué..." Estaba a punto de preguntarle qué hacía mi hermanastra, Emily, a su lado. Sin embargo, fui interrumpida cruelmente, mientras ella me miraba con una sonrisa cómplice.

"Yo, Lucas Darwin, te rechazo, Annie Marie Jones, como mi compañera!" declaró Lucas ante todos y mi cuerpo se quedó inmóvil por un momento.

No podía procesar lo que estaba pasando por un momento. Pero el dolor ardiente que atravesaba mi pecho me dijo lo que estaba sucediendo.

Dentro de mí, sentí como si un vínculo se rompiera y me trajo tanto dolor mezclado con angustia y sufrimiento.

¡Vi estrellas!

"No..." dije, temblorosa mientras me sujetaba el pecho. Mi cuerpo ardía mientras sentía que algo se rompía dentro de mí.

Mi loba aullaba en mi mente, de dolor y agonía mientras nuestra conexión con nuestro compañero se rompía.

"¿Por qué?" pregunté, con un tono tembloroso mientras miraba a Lucas y a Emily. Él se había quedado en silencio, pero Emily me miraba con una sonrisa diabólica.

"Él es mío, Anna. No te atormentes por esto." Me dijo y mis ojos se abrieron de par en par por la sorpresa.

"¿Qué? ¡Lucas nunca puede ser tuyo! ¡Él es mío!" respondí, con ira e incredulidad. Nunca pensé que Emily me traicionaría así.

Le había compartido con alegría la noticia de ser la compañera de Lucas y ahora, ella me apuñalaba por la espalda, de esta manera.

"Lucas, por favor, di algo..." supliqué, mirándolo. Sin embargo, la mirada en sus ojos mostraba claramente dónde estaba yo. Era obvio para mí.

"Quiero a Emily, no a ti, Anna." Declaró, mientras miraba a mi hermanastra con tanto amor.

¿Cómo llegamos a esto? ¿Cómo llegó a amarla en tan poco tiempo?

Graciosamente, Emily soltó suaves risitas, disfrutando del repentino protagonismo y atención. Todos la miraban con tanta adoración y respeto. ¡No podían esperar para empezar a inclinarse ante ella!

¡Todo lo que ella estaba disfrutando, se suponía que era mío!

¡La atención debería ser mía! ¡La adoración, el respeto, deberían ser míos! ¡Sobre todo, Lucas debería ser mío! ¡Pero no tenía nada!

Lentamente, ella me miró hacia abajo y comenzó a susurrar.

"¿Crees que eres digna de ser la compañera del hijo del Alfa? ¿Eh?" Emily me dijo mientras me miraba con disgusto.

El brazo de mi compañero se enroscó alrededor de su cintura, mostrando su decisión. Ella se veía tan hermosa y suave, y era la mujer perfecta para cualquier hombre fuerte.

Mientras que yo era un marcado contraste con ella, era como un diamante enterrado en un pajar. Nadie estaba dispuesto a pulir o admirar mi belleza oculta que ni siquiera estaba dispuesta a mostrar.

Fui rechazada cruelmente mientras mi compañero sucumbía a los encantos de Emily.

Estaba herida y muriendo lentamente, por dentro. Estaba sola e indefensa.

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"¿Dónde está ella?" Hubo gritos fuertes y golpes y me sobresalté en la cama.

"¿Qué demonios está pasando?!" grité, en mi mente mientras me levantaba de la cama.

Me había encerrado en mi habitación durante días después de mi vergonzoso rechazo.

Pero no entendía lo que estaba pasando en la casa.

"¿Dónde está Emily?" escuché una voz desconocida y temblé, de miedo. La voz me provocó escalofríos y di un paso atrás.

¿Qué quiere la persona desconocida con Emily?

Durante días, ella no había vuelto a casa después de ser elegida por Lucas.

Mis padres estaban al tanto de su unión y la apoyaban.

Yo estaba indefensa ya que a nadie le importaba siquiera. ¿Por qué entonces debería importarme lo que estaba pasando?

"Quedémonos solas, Wolfie." le dije a mi loba y ella ronroneó. Desde el rechazo, había estado muy callada. Ambas estábamos heridas y nos llevaría mucho tiempo sanar.

Sin embargo, antes de que pudiera volver a la cama, hubo un fuerte golpe en la puerta. Mi cabeza se giró para mirar la puerta, con ira.

"¿Quién demonios es?" dije, en un tono bajo y enojado mientras olfateaba el aire. Los aromas de mis padres estaban mezclados con varios otros aromas y todos estaban concentrados en mi puerta.

¿Qué estaba pasando? ¡Pensé que todos estaban aquí por Emily y no por mí!

"¡Tú! ¡Sal de ahí! ¡Ahora!" escuché la voz de mi padre mientras tronaba y los golpes aumentaban.

Inmediatamente, corrí hacia la puerta y la abrí. Mi padre y mi madrastra irrumpieron en la habitación junto con varios guardias desconocidos.

"¿Qué está pasando aquí?" pregunté en voz alta mientras los miraba a todos, alarmada. Comencé a retroceder, lentamente.

"¿Es ella Emily?" preguntó uno de los guardias, y temblé. Era la voz desconocida de antes.

Estaba a punto de decir que no a su pregunta, pero mi madrastra me interrumpió, inmediatamente.

"¡Sí, ella es!" respondió y mi cabeza se giró para mirarla.

"¿Qué? Yo no soy..." comencé a decir, pero fui interrumpida, de nuevo.

"¡Prepárate! ¡Tu ceremonia de apareamiento con el príncipe es en dos días!" anunció el guardia y temblé, incrédula.

¿Qué estaba pasando?