Capítulo 120 La ira de una madre

Se desplazaron lentamente hacia la esquina de la cueva. Los vientos de la montaña eran feroces, y aunque tenían algo de refugio, los soldados de Zotburg no habían sido lo suficientemente amables como para proporcionarles una fogata. El frío era mordaz, y estaban al borde de congelarse.

Zack y los d...

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