Capítulo 20 El enviado de la Ciudad Real

Ethan no tenía idea de cuánto tiempo o cuán lejos había estado caminando. Para cuando sintió ganas de tomar un descanso, el cielo ya estaba claro. Su estómago gruñó, así que decidió encontrar una taberna cercana para comer algo.

Cuando finalmente encontró una, ya había pasado la hora del almuerzo y...

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