Estatuas talladas.

Recuerdo el primer día que lo conocí, pensé que parecía un ángel. Veía todo como si estuviera viviendo una pesadilla. Ella me había dejado tan frágil, y a veces me daba té especialmente mezclado que decía que ayudaría a mi condición. Ahora, con los ojos abiertos, me daba cuenta de que lo hacía a pro...

Inicia sesión y continúa leyendo