Capítulo 106 Sueños truncados

Isabella camina sin rumbo fijo, con el alma deshilachada. El aire fresco le roza la piel como un susurro, pero no logra apagar el incendio en su pecho. Mira de nuevo el papel y asiente. Luego toma el celular, marca el número temblando. Su corazón late desbocado, como si supiera que ese llamado cambi...

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