Capítulo 30 Estás despedida

Un sutil carraspeo hace retroceder a Norma unos pasos. Su rostro es el que se torna pálido ahora viendo a su jefe parado en la puerta. No hace falta ser adivino para darse cuenta de que él oyó todo o parte de lo que acaba de decir. Su mirada, fría y llena de amenazas, habla por sí solo.

—Señor Ben...

Inicia sesión y continúa leyendo