El cometido

Hestia estaba excitándose de nuevo. No había llegado a imaginar, que simples mensajes fueran así de estimulantes. Era distinto a estar en persona, ya que se mantenía el suspenso y la intriga, de lo que fuera a responder el otro. Su tierno conejito, tenía el poder de encenderla, sin siquiera tocarla....

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