CAPÍTULO 24

Mis ojos se abrieron lentamente a una habitación extraña y desconocida. La confusión giraba en mi cabeza mientras trataba de entender mi entorno. Estaba tenuemente iluminada, con vigas de madera cruzando el techo y las paredes adornadas con intrincados tapices que representaban escenas de la natural...

Inicia sesión y continúa leyendo