CAPÍTULO 103 — Bajo su hechizo

Para cuando regresé a SilverMoon, era justo antes del amanecer, el olor a sangre y humo aún impregnaba mi ropa.

El grito de Liza rondaba en el borde de mis pensamientos, pero lo aparté. Ella era solo una anciana. Una pieza débil en un tablero de juego que ahora controlaba.

Entré al palacio. Los gu...

Inicia sesión y continúa leyendo