Capítulo 66 — El vidente

Elara

Jadeé, levantándome de la cama de un sobresalto.

Mi cuerpo estaba empapado en sudor y mi respiración era entrecortada.

Acheron se movió a mi lado. —¿Elara?— llamó, su voz ronca por el sueño.

Me apreté el pecho con las manos, aún sintiendo el calor persistente de la luz de la Diosa.

—Es tu...

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