Capítulo 19: Para ser visto

Sobre el respaldo del sofá de terciopelo esmeralda, tres vestidos estaban colgados como tesoros de otro mundo. Me quedé congelada en la puerta, mirándolos. La seda y las lentejuelas brillaban bajo la luz de la lámpara, los colores capturaban el resplandor de maneras deslumbrantes que nunca había vis...

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