Capítulo 25 - Prey

La palabra sabía extraña, no una disculpa, sino un hecho. Una pareja en la mesa más cercana dejó de fingir que no escuchaba. Más allá del vidrio, Toren no parpadeó. Uno de sus hombres murmuró algo; Toren no respondió.

Un camarero llegó—mal momento o perfecto—con dos platos: bistec, papas, una ramit...

Inicia sesión y continúa leyendo