Capítulo 43 — El primer turno

El bosque se quedó en silencio como si contuviera la respiración. Toren no había soltado mi mano desde que dejamos el resort, pero aquí, en el pequeño claro, finalmente se detuvo. La tierra bajo nuestros pies estaba húmeda y esponjosa, el musgo se enroscaba alrededor de las raíces de los viejos pino...

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