Confianza

Pasaron los días y Ada se dedicó solo a observar el comportamiento que había adquirido Ángel. Él no se había interesado más en su embarazo y parecía ocupado en todo momento. Ella solo podía ver el brillo de sus ojos y la sonrisa que llevaba en los labios.

-Tus ocupaciones te mantienen feliz, eso es...

Inicia sesión y continúa leyendo