Palabras tácitas

—Sí, lo recuerdo —la expresión de disgusto en su rostro me hizo arrepentirme de lo que dije.

—Vamos, vámonos —apresuré a Keegan a salir del hospital y subir a mi coche. No había manera de que la dejara ir a trabajar en ese estado; si fuera por mí, no tendría que trabajar, podría darle todo lo que n...

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