Sorpresa

Keegan, por favor —se levantó y me agarró del brazo—, tienes un lugar aquí conmigo más que nadie, ¿por qué no puedes ver eso? —sus ojos suplicaban que razonara con él, pero eso era imposible en ese momento, estaba abrumada por todo lo que estaba pasando, era demasiado.

Estaba haciendo mi mejor esfu...

Inicia sesión y continúa leyendo