El permiso

Capítulo 53

—Tal como supones, mi sirena. Él confía en los esclavos mientras tú no estás —dijo Carlos, uno de mis vigilantes, cuando estaba informando mientras yo me apoyaba en el poste de mi cama.

Caminé hacia él y lo obligué a mirarme. —¿Qué hay de mis vigilantes y sirvientes? ¿Qué hay de ti? ...

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