Capítulo ciento cincuenta y seis

El Consejo de Ancianos miraba a la dama frente a ellos. Tenía una expresión seria en el rostro y estaba erguida. Era una princesa y lo parecía en todos los sentidos. También hablaba como una; era refinada y su voz estaba impregnada de autoridad.

—¿Ancianos? ¿Podemos comenzar? —preguntó con un tono ...

Inicia sesión y continúa leyendo