Capítulo veintiséis

Lord Edvin tenía razón; yo era una mejor jinete que la mayoría de las mujeres. Mi destreza en la equitación también aumentó mi valor a los ojos de la gente. Lord Edvin fue lo suficientemente amable como para presentarme a personas clave que importaban en la manada Shadowclaw. Me di cuenta de que, ap...

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