18

Capítulo 18

Lo invité a pasar y le serví una taza de café. Se sentó frente a mí, cómodo, como si el tiempo no hubiera pasado, y empezó a hablarme de todo lo que había hecho en mi ausencia. Escucharlo era confuso… no sabía exactamente qué buscaba conmigo, pero se notaba que me tenía un cariño especi...

Inicia sesión y continúa leyendo