Capítulo 34

Mia caminaba de un lado a otro en su habitación, preguntándose quién estaba tras su vida. Intentó pensar en posibles personas que pudieran quererla muerta, pero nadie le venía a la mente. Mia sabía que nunca había ofendido a nadie, al menos no intencionalmente. Era una chica dulce y encantadora, sin...

Inicia sesión y continúa leyendo