Capítulo 105 - Deseos abrumadores

—¿Cómo te atreves? —Su voz era un poco entrecortada, mientras retrocedía tambaleándose desde la puerta que Eli acababa de abrir de golpe y por la que había entrado antes de cerrarla de un portazo.

—Me dejaste sola. Me estaba marchitando, me estaba muriendo.

El rostro de Eli se frunció en una mueca...

Inicia sesión y continúa leyendo