105 - Con mucho gusto

Belladonna lanzó otra piedrecita al lago, perturbando el reflejo perfecto de la luna arriba en la superficie antes quieta; se onduló, y justo en ese momento, escuchó algo desde los árboles detrás de ella, pero reaccionó demasiado tarde.

Menos mal que uno de los guerreros de sombra de Alaris era su ...

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