CAPÍTULO 45

Me sentía entumecida. No me había cambiado el vestido desde ayer ni me había movido un centímetro de mi cama desde que entré en mi habitación.

Las lágrimas habían cesado y no hacía nada más que pensar. Pensar en todo lo que he perdido.

—Paisley— escuché la voz de mi madre desde el otro lado de la ...

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