88

DIANA

Nos llevó al coche que habíamos usado para venir, nos subimos y, poco después, el conductor arrancó hacia donde estaba Jay Cross.

No podía negar el destello de nerviosismo al pensar en volver a verlo.

El misterio que lo rodeaba no se había disipado mucho. Sabíamos más sobre él que antes, pe...

Inicia sesión y continúa leyendo