LA CONFRONTACIÓN — LLEGAN LOS DATOS

Un silbido agudo cortó el aire.

Desde el otro lado del claro, Dara apareció a caballo, su capa forrada de runas, la luz de la antorcha proyectando sombras afiladas en su rostro. Una docena de jinetes la seguían.

—¡Toma! —llamó, desmontando—. ¡Aléjate del altar!

Los ojos de Kelvin se entrecerraron....

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