Capítulo 163

Al ver la torre de caída, que parecía aún más intensa que una montaña rusa, el corazón de James comenzó a acelerarse.

—Emmy, ¿cómo puedes gustarte estas atracciones locas?

James no podía creerlo. Emily, que parecía tan delicada, amaba todas estas atracciones llenas de adrenalina.

—¡Por supuesto! ...

Inicia sesión y continúa leyendo