Capítulo 42

Gloria dudó, sintiendo una oleada de precaución.

—¿No es algo que el conductor puede manejar? ¿Dónde está? —preguntó.

Mira suspiró—. Tenemos dos conductores. Uno está libre hoy, y el otro acaba de irse con el Sr. Windsor a la Mansión Windsor. Puedes tomar un taxi, y yo cubriré el costo.

Gloria to...

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