Capítulo 72

Había una cosa que odiaba más que nada.

Su silencio.

Ella solo me miraba fijamente, tratando de procesar lo que acababa de decir. Luego, de repente, apareció una sonrisa en su rostro, pero desapareció al segundo siguiente.

Lentamente recogió su ropa, se vistió y luego salió de la oficina en silencio...

Inicia sesión y continúa leyendo