Capítulo 332 Espérate, no te preocupes

En ese momento, cuando Elizabeth estaba tan emocional, no tenía ni idea de cómo consolarla. Así que terminé dándole unas palmaditas en la mano, tratando de ofrecerle algo de consuelo, aunque me parecía bastante inútil.

De repente, Ava intervino —¿Estás bromeando? ¿Quién sueña con tres personas apre...

Inicia sesión y continúa leyendo