Capítulo 36: La verdad en el final.

Aquella mañana el cielo nuevamente amanecía de color gris. Las pesadas gotas de lluvia caían sobre el pavimento humedecido, haciendo un ruido fácil de reconocer. Los pájaros se escuchaban cantando a lo lejos, refugiados de la insistente lluvia que no parecía tener la intención de detenerse, y Adalet...

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