Capítulo 49-Castigo

Los observé obedecer mi orden, con lágrimas corriendo por sus rostros mientras llevaban a cabo el retorcido castigo que había ideado, y una perversa sensación de satisfacción me envolvió. No pude evitar reír, el sonido resonando en la habitación como un coro de locura.

Sus llantos solo alimentaban ...

Inicia sesión y continúa leyendo