Capítulo 152

Owen bajó la cabeza tímidamente, con las orejas teñidas de rojo.

Iván no pudo evitar soltar una risita.

Este chico siempre intentaba hacerse el ángel; ¿cuándo empezó a ponerse tímido?

—Vamos, es hora de ir a casa —dijo Iván fríamente.

La sonrisa satisfecha de Owen se congeló en su rostro.

Agarr...

Inicia sesión y continúa leyendo