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Zade

—Lo siento mucho. Lo siento mucho. No lo sabía, cariño. No lo sabía— susurré mientras el horror, el shock y el dolor me desgarraban el pecho. —No lo sabía. Por favor, perdóname, por favor.

Sostuve las manos que sujetaban mi rostro y miré sus ojos llenos de lágrimas. Ella usó las yemas de sus ...

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