CAPÍTULO TREINTA Y NUEVE

Desde la perspectiva de Daemon.

Camino hacia el estudio privado de mi padre, sintiéndome muy incómodo al llamarlo mi padre mientras abro la puerta. La habitación se ve exquisita, la mesa de caoba ultra grande en una sala semicircular, pulida a un brillo por los sirvientes que habían sido obligados ...

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