Capítulo veintiséis

Desde la perspectiva de Edwina

Miré al Alfa Derrick mientras estaba allí, sin palabras. No esperaba que realmente pidiera dinero. Pensé que Elena por sí sola sería suficiente para volverlo loco, de modo que estaría satisfecho y contento con el hecho de que conseguiría una mujer hermosa como Elena p...

Inicia sesión y continúa leyendo