Continuación

Sus gafas estaban ligeramente torcidas por su episodio con el escritorio, pero aparte de eso, se veía bien, en realidad energizada, ya que su rostro brillaba ligeramente. Apreté la parte trasera de sus muslos con fuerza y comencé lentamente, aumentando gradualmente mi ritmo. Su cuerpo golpeaba cada ...

Inicia sesión y continúa leyendo