Libro 2 Parte 42

No había portero en este edificio y él se quedó afuera esperando a que alguien saliera o entrara. Esperó una hora antes de que una anciana abriera la puerta y él se la sostuvo sonriendo.

—Gracias, joven—. La anciana le sonrió agradecida. Él le devolvió la sonrisa y luego se deslizó adentro. Subió l...

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