Libro 2 Parte 57

Las cosas en casa estaban tensas. Adara y yo apenas hablábamos, y cuando lo hacíamos, era en monosílabos y solo cuando teníamos que hablar entre nosotros. Todavía estaba furioso con ella, pero ambos éramos igual de tercos y nos negábamos a ceder.

Ella aún no me había contado toda la historia y mi p...

Inicia sesión y continúa leyendo