Libro 2, parte 115

Malachi estaba cerca de las escaleras, pero se dio la vuelta para mirarla. Estaba demasiado impactado para articular una frase.

—Adara, yo...

—No me importa lo que quieras. Él estaba dispuesto a morir contigo esta noche, si ya nada más te importa, ¡eso debería hacerlo! Te sugiero que te tomes un t...

Inicia sesión y continúa leyendo