Libro 3, parte 95

Adara regresó a casa justo antes de la cena, mucho más tarde de lo habitual, y me pregunté si era para evitarme o por su acompañante. Me dolía pensar en ese acompañante, pero era mi culpa. La había alejado una y otra vez.

Fui un idiota, pero me había propuesto hacer una cosa y la había hecho. No me...

Inicia sesión y continúa leyendo