Capítulo 148

—Emília —llamó mi padre, deteniendo mis pasos fuera de la cocina—. Te queremos mucho. Todo lo que decimos y hacemos puede que no sea lo que esperas de nosotros. Tu madre y yo hemos tenido tu edad. Lo sabemos. Pero el amor de un padre es incondicional. Más grande que cualquier cosa que puedas experim...

Inicia sesión y continúa leyendo