37

El resto del viaje de regreso a casa lo pasamos sin hablar. Cuando Nevaeh y yo llegamos a mi penthouse, nos separamos por razones obvias. Apenas puedo controlar mi enojo, mientras que Nevaeh está demasiado ocupada con Kai.

Sus ojos siguen pegados a su teléfono. Podría estar tratando de encontrar un...

Inicia sesión y continúa leyendo