Capítulo 145 No sé quien es

Esa noche, la lluvia comenzó a caer con una furia inusitada.

No parecía tener intención de dar tregua a los habitantes de la aldea, quienes temían la crecida del río que la circundaba.

Elizabeth estaba inquieta. Tenía un mal presentimiento.

Por suerte, no estaba sola. A su lado, como siempre, estab...

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