Capítulo ocho

Cheyenne

La mañana después de que Dallas se va se siente mal antes de que mis ojos se abran, y la sensación se instala profundamente en mi pecho como algo pesado que presiona desde adentro. Me quedo allí por un minuto, mirando el techo, escuchando el silencio que se extiende por la casa, y mi cuerp...

Inicia sesión y continúa leyendo