Capítulo 38 Un monstruo

Los pequeños dientes de Sterling eran visibles mientras crecían y se volvían más puntiagudos. El niño lo miraba con furia, listo para atacar. Todo el cuerpo del secuestrador comenzó a temblar.

Avanzó, haciendo que el hombre se estremeciera de terror, diciendo, "Ve y encuentra algo para mantener a m...

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