91 Los pensamientos de Nate

No había tiempo para más conversación; bajo la mirada triste de Caiden, Kamara salió del edificio, se subió a su coche y se fue. Una lágrima escapó de sus ojos, pero Caiden la secó rápidamente. No había tiempo para lamentarse. Nunca había sentido un dolor tan profundo como cuando rechazó a Kamara pa...

Inicia sesión y continúa leyendo